Oración de Salve.
La oración de Salve, se encuentra dirigida a la Inmaculada Madre de Dios, quien es la Reina de los Apóstoles, sabemos que fue ella quien motivo el mandamiento del amor de Dios y nuestra vocación de seguir a Jesucristo, lo que nos impulsa a cooperar en la misión de la Iglesia.
Al darnos cuenta de nuestra propia debilidad, confiamos la renovación de nuestras vidas personales y nuestro apostolado a su intercesión, por ello estamos seguros de que a través de la misericordia de Dios y los méritos infinitos de Jesús Cristo, ella, quien también es nuestra Madre, nos ayudará a obtener la fuerza del Espíritu Santo como lo obtuvo para la comunidad de los apóstoles reunidos en la habitación superior y para la concepción de Jesucristo.
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¿Por qué encomendamos la oración de Salve a María?
Esto es motivado a que, confiando en su intercesión materna, resolveremos desde ese momento dedicar nuestros talentos, aprendizaje, recursos materiales, nuestra salud, enfermedad y pruebas y cada don de la naturaleza y la gracia, para la mayor gloria de Dios y la salvación de todos.
Desearemos con la oración del Salve continuar aquellas actividades que promueven especialmente la católica apostólica para la reactivación de fe y el amor del pueblo de Dios y de esta manera traer a todos los hombres y mujeres en la fe de Cristo.
Si llegado el momento en el que no tenemos nada más que ofrecer para este fin, lo haremos, no dejaremos de rezar porque no habrá un solo rebaño y un solo pastor que no desee regocijarse en la gracia de Jesús, de esta manera, esperaremos para disfrutar de los resultados del apostolado del hijo de Dios por toda la eternidad.
Nos convertiremos en seres conscientes de nosotros, al estar cerca de ella quien concedió todas las gracias, porque es la Madre de Dios y nuestra Reina, con la oración de Salve, nos ayudaremos por el bien del Rey, el Señor Dios y el Maestro que nació de nuestros corazones.
¿Es recomendable usar la oración de Salve para pedir por nuestras peticiones?
Por esta razón, somos llamados al mundo lleno de gracia, con la oración de Salve, recordamos a la santísima Virgen, para que nos conceda el regalo de las riquezas de sus gracias, por es Virgen llena de gracias.
Es la Reina del cielo, por el Hijo que tuvo el privilegio de llevar, que ha resucitado como él dijo, ayudándonos a rogar a Dios por nosotros.
Fue ella quien pidió por la resurrección de su Hijo, nuestro Señor Jesús Cristo, quien trajo alegría al mundo, haciendo que a través de la intercesión de la Virgen María, su Madre, podamos alcanzar el gozo de la vida eterna.
Con la oración de Salve guardamos a Dios, de toda mezquindad, siendo grandes en pensamiento, en palabra, en hecho, por lo que debemos terminar con la búsqueda de fallos y olvidarnos de toda búsqueda de uno mismo.
Podemos dejar de lado todas las apariencias y encontrarnos cara a cara, sin autocompasión y sin prejuicios, para que nunca seamos apresurados en el juicio, y siempre seamos generosos, siempre dediquemos tiempo a todas las cosas y hagamos que crezcamos tranquilos, serenos y amables.
Oracion dormir
Oracion San Benito